Cuando una persona pierde a los padres, se le llama huérfano. Cuando pierde a su compañera o compañero, se lo llama viudo o viuda. Pero, ¿cómo nos referimos a alguien que ha perdido un hijo? Alan y Naty decidieron llamar a ese nuevo momento “esperanza viva” y mantener el énfasis en el reencuentro con la pequeña Maia.